• La OIM Perú ha promovido la formación de casi 160 personas de la población migrante en la preparación y respuesta ante una emergencia o desastre.

Leidy Marruz es una migrante venezolana que vive en el asentamiento humano Huampaní, a diez kilómetros del centro del distrito de Lurigancho-Chosica, en Lima. Pese a la distancia y a diversos problemas de movilización, cada domingo, durante tres meses, Leidy participó de un proceso de capacitación de brigadistas comunitarios en gestión de riesgo de desastres que la OIM Perú y la ONG Cesal, brindaron a la población migrante y a la comunidad de acogida del distrito de Lurigancho-Chosica.

Potenciales emergencias y desastres por diversa índole son uno de los tantos desafíos que enfrentan las personas migrantes que viven en Perú y que comparten con la comunidad local. Sin embargo, sismos, huaicos e inundaciones pueden ser fenómenos totalmente desconocidos para buena parte de quienes han llegado al país, lo que los hace más vulnerables ante el impacto de un peligro. 

Luego de que, a mediados de 2023, el gobierno nacional declarara estado de emergencia en varios distritos de Lima Metropolitana y regiones del norte del país ante los efectos de lluvias intensas generadas por el Ciclón Yaku y/o Fenómeno El Niño, la OIM Perú y Cesal, junto con la Municipalidad de Lurigancho-Chosica, pusieron en marcha un proyecto para el fortalecimiento de capacidades en preparación y respuesta ante una emergencia o desastre dirigido a la comunidad del distrito, con participación activa de autoridades y líderes comunitarios, incluyendo a población migrante.

En diciembre pasado, 48 personas migrantes venezolanas, una brasileña y ocho personas de Perú fueron certificadas como brigadistas comunitarios en preparación y respuesta ante desastres, después de concluir satisfactoriamente un proceso de capacitación de más de 80 horas lectivas. Además, 25 funcionarios de la municipalidad fueron capacitados para la inclusión de personas  migrantes en la gestión del riesgo de desastre. Con esto, las comunidades se encuentran mejor preparadas para dar una respuesta organizada.

“Nosotros en Venezuela no vivimos esto de los huaicos, ni de los temblores ni terremotos, por eso quise estar capacitada para poder ayudar tanto a las personas de la comunidad migrante, como de la zona donde me encuentro viviendo”, comenta Leidy respecto al proceso de formación que realizó y que aprobó con éxito.

Proyecto inicial

En 2022, la OIM Perú comenzó a desarrollar un proyecto de brigadas comunitarias para la preparación y respuesta ante emergencias y desastres, en comunidades con una importante presencia de población migrante, sentando las bases para su inclusión en los procesos de gestión del riesgo de desastres a nivel local.

A nivel país, las brigadas comunitarias de Defensa Civil integran a grupos de personas organizadas, entrenadas y debidamente capacitadas para asistir a otros miembros de la comunidad, en situaciones de emergencia o desastres. Considerando que muchas de las personas migrantes que ha llegado a Perú tienen experiencia en atención de protección civil y de emergencias, la OIM Perú vio la oportunidad de integrarlas en la gestión del riesgo de desastres con un enfoque comunitario, para que pudieran aportar con sus conocimientos.

La primera promoción de 52 brigadistas comunitarios, integrada por 50 personas migrantes de Venezuela y dos personas peruanas, se graduó en San Juan de Lurigancho en enero de 2023, luego de cuatro meses de formación, 100 horas de capacitación virtual y ejercicios prácticos de acuerdo a la malla curricular establecido por el Instituto Nacional de Defensa Civil (INDECI).

Nuevos brigadistas

En los primeros meses de este año, se espera incorporar al menos 40 nuevos brigadistas comunitarios de población migrante y población de acogida, una vez que concluyan los procesos de formación que se están realizando en los distritos del Rímac (Lima Metropolitana) y Veintiséis de Octubre (Piura), en alianza colaborativa con la ONG Unión Venezolana, y en coordinación con ambas municipalidades, mediante sus funcionarios y equipos de gestión del riesgo de desastres distritales.  

De acuerdo con el programa vigente de formación, los brigadistas serán entrenados en prevención y manejo de incendios, en estrecha articulación con la compañía de bomberos de cada municipio; maniobras de reanimación, primeros auxilios, aplicación de vendajes, inmovilización y traslado de lesionados en camillas.

Luego de dos meses de capacitación, se espera contar con brigadistas comunitarios entrenados y equipados para responder a emergencias o desastres, bajo la administración de los gobiernos locales en concordancia con los procedimientos y normativas de la gestión del riesgo de desastres. 

En paralelo a este proceso de formación de brigadistas, la OIM Perú ha entregado 283 mochilas de emergencias, tanto a la comunidad migrante como a la de acogida, en 5 distritos del país, previa capacitación sobre uso e importancia. 

A mediados de abril, la OIM espera realizar el primer encuentro de brigadistas comunitarios formados en 2022 y 2023, con el propósito de reforzar capacidades y actualizar sus conocimientos, así como promover redes de colaboración y organización entre ellos.

Todas estas actividades de la OIM Perú han sido posibles gracias al apoyo financiero de la Oficina de Población, Refugiados y Migración del Departamento de Estado de los Estados Unidos (PRM por sus siglas en inglés).